En una charla amena e informal, investigadores politécnicos compartieron varias reflexiones sobre la importancia de los estudios geográficos, geológicos y de la Tierra para prevenir riesgos como derrumbes e inundaciones. Esto, a propósito de los eventos extremos ocurridos en los últimos meses en Guayaquil y algunas zonas del país.
Como parte de la tercera edición del Programa Chela Científica que impulsa la ESPOL, para compartir conocimientos con la ciudadanía acerca de temas de coyuntura e interés, se realizó esta actividad el 25 de abril en las instalaciones del Pop Up Teatro Café.
En esta ocasión, se abordó el tema La Tierra, nuestro hogar está en riesgo ¿Cómo prevenirlo?
El panel estuvo conformado por la directora del Centro Internacional del Pacífico para la Reducción del Riesgo de Desastres, María del Pilar Cornejo; el investigador y profesor de la Facultad de Ingeniería Marítima y Ciencias del Mar, Jonathan Cedeño; el investigador y profesor de la Facultad de Ingeniería en Ciencias de la Tierra, Andrés Velasteguí; y el líder de Gestión Ambiental en Cervecería Nacional, Marlon García.
La charla se convirtió en una oportunidad para concientizar a la comunidad sobre la importancia de crear una cultura de prevención, al ser Ecuador un país multiamenazas.
Con la moderación de la coordinadora de Divulgación Científica del Vicerrectorado de I+D+i de la ESPOL, Sofía Cabrera, el público fue parte de una conversación dinámica y fluida, acompañada de una refrescante cerveza.
El diálogo comenzó con una interrogante… ¿Son naturales los desastres? Y la respuesta fue “No”. Las amenazas son naturales y los desastres son provocados por un factor humano. Entender la diferencia de ambos conceptos es importante para que las comunidades puedan prepararse y los tomadores de decisiones, ejecutar alguna acción.
El profesor e investigador de la FICT, Andrés Velasteguí, enfatizó en que se puede aprovechar la data disponible para sacar una probabilidad en los casos, por ejemplo, de deslizamientos de tierra. “Se puede tomar la data disponible para procesarla, ver dónde han ocurrido deslizamientos, qué factores hubo y ver qué otras zonas tienen características similares”, mencionó.
Otro de los temas que se abordaron estuvieron relacionados con la llegada del Fenómeno de El Niño y las últimas lluvias extremas. El profesor de la FIMCM, Jonathan Cedeño, dijo que con el cambio climático “hay predisposición de que en la atmósfera haya más humedad y eso puede provocar lluvias extremas, haciendo que llueva más en menos tiempo”.
Sobre la crisis climática, la directora del Centro Internacional del Pacífico para la Reducción del Riesgo de Desastres, María del Pilar Cornejo, dijo que es una realidad y ya está aquí.
“El cambio climático lo que hace es que todo esté más cálido. Lo que hace es exacerbar los extremos y modifica el clima. Esta crisis climática no se va; si no hacemos algo hasta el 2030, esto continúa”, expresó.
Y ante esta realidad, ¿qué se puede hacer desde los gobiernos locales, las industrias y la ciudadanía?
El líder de Gestión Ambiental en Cervecería Nacional, Marlon García, destacó la importancia de trabajar en comunidad. “No trabajamos solos, como industria nos planteamos permanecer por muchos años y debemos consultar con los expertos. Por ejemplo, si una ley no está clara, debemos pedir que se aclaren las dudas y trabajamos junto con la comunidad”, expresó.
Además, dijo que al crear una cultura de prevención todas las pequeñas acciones cuentan, como por ejemplo, la limpieza de canales de lluvia y mantenimientos programados. “Todo está en la gestión, en ver lo que está pasando y qué se está haciendo en otros países. Vivimos en un mundo globalizado y podemos ver esos referentes internacionales y adaptarlos a este entorno”, señaló.
María del Pilar Cornejo mencionó que a medida que las ciudades crecen, las mismas obras que se ejecutan incrementan el riesgo y por eso es tan importante el trabajo que realizan las autoridades locales, al momento de dar permisos de construcción, por ejemplo.
“Hoy para evaluar el riesgo hay que revisar el tipo de amenazas ambientales y sociales. Todo suma y como ciudadanos podemos reducir la vulnerabilidad”.
En relación con el tema de inundaciones, los expertos hicieron referencia a las soluciones verdes, como los sistemas que recolectan el agua, construcción de veredas y parterres con materiales permeables, restauración y conservación de manglares, etc.
5 REFLEXIONES QUE DEJA LA TERCERA EDICIÓN DE LA CHELA CIENTÍFICA:
1) Se debe empezar desde casa con la autoprotección, como tener un plan familiar de emergencia y una mochila de emergencia.
2) La prevención es tarea de todos y es importante acudir a las fuentes oficiales para mantenerse informado.
3) Una solución transversal a todas las áreas es la concientización y el trabajo colaborativo, para ayudar a construir una cultura de prevención.
4) No existe una solución única, sino una combinación de acciones.
5) Las personas deben estar en el centro de cualquier acción que propongan los tomadores de decisiones.
La próxima Chela Científica se realizará en el mes de mayo y se abordará el tema de la Agroindustria y los alimentos del futuro.