La resiliencia del sector turístico en Ecuador motiva a que más actores se sumen para potenciar esta actividad; es por eso que la ESPOL dedicó su duodécima Chela Científica al análisis de este campo, con especialistas de la academia, la empresa pública y la privada.
Nuevamente, el Pop Up teatro café tuvo un aforo completo, donde los asistentes disfrutaron de una nueva jornada de difusión científica, promovida por el vicerrectorado de Investigación Desarrollo e Innovación (I+D+i).
Los panelistas invitados para esta edición, denominada ‘Ecuador infinito, co-creando el futuro del turismo en Ecuador’ fueron:
- Carla Ricaurte, coordinadora del Grupo de Investigación en Turismo Marino y Costero de la ESPOL.
- Ángelo Calderón, director provincial de Turismo de la Prefectura del Guayas.
- Hugo Rivera, gerente general de Tryp by Wyndham Guayaquil.
- Lorraine Akel, director of sales del Hilton Colón Guayaquil.
El trabajo conjunto entre los sectores fue el principal punto de coincidencia entre los panelistas, reconociendo que el turismo atraviesa una “policrisis”, a causa de factores internos y externos, que se potencian por la inseguridad del país.
A pesar de estas condiciones, entre finales del 2022 y mediados del 2023, se recuperaron los niveles de demanda que había en el sector, previo a la pandemia del Covid-19. Ahora, el reto planteado por el sector turístico es recuperar también los porcentajes de tarifa de esa época.
El turismo sostenible -que garantiza tener el mismo presente a futuro- es una idea que está perdiendo adeptos, pues ahora se buscan políticas de turismo regenerativo, con el que se podría generar un futuro con mayores beneficios y un panorama más prometedor.
Con estas premisas, se hizo énfasis en que el turismo es un dinamizador de la economía con beneficios en doble vía: los visitantes disfrutan de las bondades de los destinos y los locales se benefician de los ingresos, además de promover un sentido de orgullo y pertenencia.