Freddy Magdama (derecha en la foto), investigador del Centro de Biotecnología, CIBE-ESPOL, expuso seis lecciones del COVID-19 para hacer frente al Fusarium Raza 4 Tropical (FocR4T) en Ecuador. En el marco del V Congreso Internacional de Biotecnología y Biodiversidad, CIBB-2020, Magdama hizo un llamado a la reflexión desde una visión personal y un análisis crítico.
El especialista en Fitopatología y miembro de la Fuerza de Tarea Nacional para la Prevención de FocR4T en Ecuador brindó algunos datos relevantes sobre este hongo. Por ejemplo, detalló que en los años 50 la Raza 1 de este patógeno acabó con la variedad de banano Gros Michel, mientras que hoy, la Raza 4 Tropical es considerada la nueva amenaza para la industria. La Raza 4 está presente en más de 20 países y en 2019 se reportó en Colombia (primera incursión de FocR4T en el continente americano).
Magdama luego estableció una analogía entre el Fusarium y el SARS-CoV-2 e hizo la interrogante: ¿Por qué comparar un virus con un hongo? La respuesta: “Aunque existen diferencias de tipo biológicas, existen aspectos epidemiológicos en estas enfermedades causadas que se asemejan”. Por ejemplo, son agentes infecciosos, de transmisión no visible, de fácil dispersión y tienen tiempos de incubación prolongados.
Asimismo, detalló los errores y las lecciones aprendidas en la pandemia por COVID-19 y dio sugerencias técnicas para el manejo de FocR4T en banano.
A continuación, algunas ideas destacadas durante su intervención:
Primer error: Creer que nunca nos pasará
Magdama dijo que a pesar de la evidencia que existía, muchos creían que el COVID-19 no era una amenaza, pensamiento similar que algunos pueden tener con relación al FocR4T. “En el caso del coronavirus, los casos crecen exponencialmente y se evidencian de manera rápida; quizás en el caso del Fusarium no se efectúe de la misma forma, pero esto no implica que la dispersión no pueda comportarse de forma similar epidemiológicamente hablando”.
Lección: Invertir tiempo y recursos en prevención antes que la situación se salga de control.
Segundo error: No reportar
“De igual manera que con los brotes de COVID-19, esto puede tener un impacto negativo si lo miramos en un escenario agrícola. Ocultar casos sospechosos y tiempos de detección tardíos pueden agravar el problema. Y este es un mensaje directo para los productores, exportadores y todos los involucrados en la cadena. Al ver una planta con síntomas sospechosos es mejor reportarla. Para controlar este hongo y tomar medidas de contención, se debe trabajar coordinadamente”, expresó el experto.
Lección: Un reporte eficaz y oportuno genera confianza y mejora la toma de decisiones.
Tercer error: Tiempo de respuesta
“(En el tema de Fusarium) se han realizado esfuerzos colaborativos, liderados por Agrocalidad para tratar de homologar las tecnologías de detección. Y este esfuerzo ha conllevado a que otras dos instituciones, incluidas la ESPOL y el Instituto Nacional de Investigaciones Agropecuarias (Iniap), se unan para brindar este servicio de diagnóstico”, indicó el especialista en Fitopatología al tiempo de mencionar que se deben fortalecer aún más estas alianzas para estar preparados.
Lección: Fortalecer las capacidades de diagnóstico acorde a nuestra realidad.
Cuarto error: Subestimar el avance de la enfermedad
En este punto Magdama destacó que el cerco epidemiológico constituye una segunda oportunidad para contener a cualquier patógeno. “Debemos rastrear, testear, aislar y, en el caso de encontrarlo, contenerlo. Para hacer esto de aquí, debemos ser conscientes de que necesitamos personal suficiente y capacitado para reconocer los síntomas de la enfermedad. En ESPOL hemos desarrollado una guía de reconocimiento de síntomas”. Información en: espol.edu.ec/fusarium-r4t
Lección: En caso de incursión, la contención no debe escatimar esfuerzos.
Quinto error: Mal manejo de datos
Debemos evitar causar confusión y desconfianza en la población afectada, enfatizó el experto. “El manejo de la información de manera abierta y transparente es esencial en tiempos de crisis y riesgos. Por ello, en el escenario agrícola hemos propuesto SIMMOBAN, un sistema integrado de manejo y monitoreo de banano. Una plataforma tecnológica que sirva para tomar decisiones apropiadas. Información valiosa disponible para todos”.
Lección: Aprovechar el conocimiento colectivo para tomar mejores decisiones frente a un fenómeno desconocido.
Sexto error: Tomar decisiones sin fundamento técnico-científico
Lo importante es tener certeza de atacar la vía de dispersión y contagio de la manera correcta. Si no la hay, hay que investigar, dijo Magdama. “Estamos trabajando en conjunto con otras universidades en una plataforma de investigación multipropósito para Fusarium”.
Lección: Tomar decisiones basadas en evidencia comprobada puede hacer una gran diferencia.