Proyectos politécnicos se destacaron y ganaron en tres de las seis categorías de la edición 2024 de los Retos Ambientales Guayas y Quil. Estos premios los otorgó el Gobierno Autónomo Descentralizado Municipal de Guayaquil a través de la Dirección General de Ambiente; y la Empresa Pública Municipal para la Gestión de la Innovación y Competitividad, ÉPICO.
Los Retos Ambientales Guayas y Quil son un reconocimiento público que brinda incentivos económicos a los ganadores que hayan presentado soluciones inspiradoras para ser implementadas en el cantón, en concordancia con la gestión municipal y con un enfoque de sostenibilidad. Los proyectos presentados fueron pensados para la conservación de la biodiversidad, el turismo sostenible, tecnologías eco amigables, educación ambiental y el involucramiento de jóvenes en los desafíos por la conservación del ambiente.
La ceremonia de premiación se realizó este 20 de diciembre en el Salón de la Ciudad “Dr. José Joaquín de Olmedo y Maruri”. Los proyectos desarrollados por los tres equipos conformados por politécnicos ganaron en las categorías Educación Ambiental, Tecnología y Turismo.
El profesor de la Facultad de Ciencias de la Vida y responsable del Bosque y Vegetación Protector Prosperina, Julián Pérez, dirigió unas palabras en representación de los galardonados, en las que destacó la iniciativa que —dijo— motiva a trabajar por un futuro más sostenible para la ciudad. “Este concurso nos ha permitido demostrar que, con creatividad, compromiso y trabajo en equipo, podemos desarrollar proyectos que beneficien al ambiente y a nuestra comunidad”, aseveró.
PROYECTOS POLITÉCNICOS GANADORES
CATEGORÍA EDUCACIÓN AMBIENTAL:
WASTE PATROL
Este proyecto busca crear un recurso didáctico audiovisual para enseñar a niños entre 5 y 12 años de edad sobre el reciclaje y la gestión de residuos en Ecuador. Incluye animaciones "cut out" con personales y escenarios icónicos e históricos de la ciudad; además de juguetes didácticos hechos de plástico reciclado para reforzar la educación ambiental en escuelas públicas.
Los creadores fueron el director del Laboratorio de Procesamiento de Plásticos y profesor de la Facultad de Ingeniería en Mecánica y Ciencias de la Producción (FIMCP), Andrés Rigail; la técnica de laboratorio de procesamiento de Plásticos, Angie Mendoza; la técnica docente Estephany Adrián; el coordinador de Diseño de la Gerencia de Comunicación, José Manuel Ramírez; y miembros de ¡ajá! Parque de la Ciencia.
Esta idea ganadora ayuda a resolver problemas como la falta de conciencia sobre el reciclaje y la gestión de residuos sólidos, la insuficiencia de recursos educativos sobre reciclaje en escuelas y la contaminación en Guayaquil, debido a la mala clasificación y manejo de residuos.
Para los ganadores, este reconocimiento simboliza un logro significativo como contribución académica y práctica a la sociedad, demostrando el compromiso de la ESPOL con la sostenibilidad y el desarrollo comunitario.
CATEGORÍA TECNOLOGÍA:
WILDFIRE
El proyecto tiene como objetivo implementar un sistema de alerta ultra temprana para la detección de incendios forestales mediante sensores termosensibles, integrados con inteligencia artificial y conectados a una plataforma en la nube. Este sistema permitirá monitorear en tiempo real el Bosque Protector Bosqueira, en Guayaquil, y responder rápidamente a las alertas de posibles incendios.
La idea surgió como respuesta a la creciente incidencia de incendios forestales en el país, debido principalmente a actividades antropogénicas indirecta o indirectamente, y potenciado por el cambio climático. Los incendios forestales han afectado ecosistemas únicos como es el caso del Bosque Protector Bosqueira.
La detección tardía de incendios forestales causa pérdidas masivas de biodiversidad y daño a comunidades locales, además de liberar gases de efecto invernadero. Los desarrolladores de esta idea fueron el profesor de la FCV, Julián Pérez; y las estudiantes de Biología Paulette Guerrero y Donna Samaniego.
Según sus desarrolladores, este proyecto supera los métodos tradicionales de vigilancia y proporciona una solución escalable y replicable para otras áreas vulnerables.
CATEGORÍA TURISMO:
TURISMO RURAL BASADO EN EL ALGARROBO Y CHIVO MORREÑO
El proyecto nace del Semillero de Planificación Turística, un club de estudiantes liderado por las profesoras Carla Ricaurte, Cinthy Veintimilla y Lady Soto, del grupo de Investigación en Turismo Marino y Costero de la ESPOL y del Comité Turístico El Morro.
La propuesta posee tres componentes para la parroquia El Morro: Fortalecimiento cultural y ambiental, propuesta de creación de valor a través del turismo, y comunicación y comercialización.
Lo que diferencia a este proyecto es la regeneración turística, que va más allá de revivir el destino, trabajando en un modelo de turismo colaborativo rural y regenerativo; es decir, no solo se busca mitigar o conservar el destino, sino dejarlo en mejores condiciones que las actuales, promoviendo la participación de todos quienes cohabitan el destino, creando condiciones a favor de todas las formas de vida del lugar.
El proyecto fue posible gracias a un trabajo colaborativo entre la comunidad y la Academia. Participaron los estudiantes de la carrera de Turismo de la Facultad de Ciencias Sociales y Humanísticas, Dereck Chuez Plúa, Leslie Mancheno Basurto, Marjorie Carvajal Bernal, Alexander Laz, Maverick Cedeño Arias, Natanael Cagua Baque, Cristopher Tobar Quezada, Melania Contreras Alvarado y Yasmani López Loor.
